Se cultiva normalmente a más de 700 metros de altura y necesita de un ambiente frío.

En la Marina Alta se puede encontrar en Vall D´Ebo, Vall d´Alcalá o en Castell de Castells. La variedad autóctona de la comarca es denominada "cul de ciri". El perelló se recoge cuando aún está verde en el árbol y se madura cubierto en tela durante un mes, hasta que adquiere un color acanelado, momento en el cual, está a punto para el consumo. La piel es dura; se recomienda consumirlo pelado. Es más dulce que la manzana.

En la cocina, el consumo habitual es fresco y natural, como una pieza única o en ensalada de frutas. También da buen resultado en la elaboración de postres, mermeladas y helados. El perelló puede sustituir cualquier variedad de manzana en las recetas que la incluyen entre sus ingredientes. Como fruta de invierno, se consume mayoritariamente de noviembre a mayo.