Las Antiguas Atarazanas de Dénia son un valioso testimonio del pasado marítimo de la ciudad. Situadas junto al puerto, estas construcciones servían como astilleros donde se construían y reparaban embarcaciones durante la Edad Media y la Edad Moderna. Su presencia recuerda la relevancia estratégica y comercial de Dénia en el Mediterráneo, vinculada tanto al comercio como a la defensa naval.
Hoy en día, el edificio conserva su carácter histórico y su interés cultural y patrimonial, que transporta al visitante a la época en la que la ciudad fue un punto clave en las rutas marítimas.
Del edificio original solo se conserva parte de la primera planta. Su interior está dedicado a uso privado albergando un hotel.
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