Hay estacionamientos públicos y privados repartidos por la ciudad, además de áreas junto a la costa. En temporada alta o durante eventos festivos, conviene aparcar en los aparcamientos más periféricos al casco urbano y caminar unos minutos hasta el centro. También es una buena idea llevar GPS para evitar las zonas peatonales o de carga y descarga que pueden complicar el acceso.