Si paseas por la orilla de nuestras playas, es posible que encuentres montones de hojas secas que llegan con las olas. No son algas, sino restos de posidonia oceánica, una planta marina única del Mediterráneo y auténtico tesoro natural que debemos proteger.
¿Por qué es tan importante la posidonia?
Los restos que ves en la orilla cumplen también una función natural: amortiguan el oleaje, protegen la arena y forman parte del ciclo ecológico de la playa. Aunque puedan resultar incómodos, son el mejor indicador de que estás en un litoral vivo y bien conservado.
Una normativa para su conservación
Para asegurar la protección de la posidonia y del litoral, en mayo de 2024 la Generalitat Valenciana aprobó el Manual de Buenas Prácticas sobre la retirada de restos de posidonia, en cumplimiento del Decreto 64/2022. Este documento determina en qué playas, temporadas y condiciones se pueden retirar los restos que llegan a la orilla.
El catálogo de playas de Dénia distingue cuatro categorías:
De esta clasificación depende si la posidonia se mantiene en la orilla o si puede retirarse parcialmente en temporada turística.
Playas donde no se retira la posidonia como norma general
En las playas naturales y de mayor valor ecológico, la retirada no está permitida, aunque sí se produce un cribado, excepto en la franja más cercana a la orilla, donde han de dejarse los arribazones de posidonia, ya que la posidonia protege la costa frente a la erosión.
En Dénia, esto afecta a:
Playas donde está permitida la retirada
Entre el 15 de marzo y el 31 de octubre, se autoriza la retirada controlada en determinados tramos de playa urbana:
Entre el 1 junio al 31 de octubre:
Cómo cuidarla