La coca cruixent de seitons (en castellano, coca crujiente de boquerones) es una deliciosa especialidad típica de Dénia, donde la tradición marinera se une con la creatividad culinaria mediterránea. Este plato combina la ligereza de una masa fina y dorada con el sabor fresco y delicado del boquerón, uno de los pescados más apreciados del litoral dianense.
La base de la coca se elabora con harina, aceite de oliva virgen extra, agua y una pizca de sal, trabajada hasta conseguir una textura elástica que, al hornearse, se convierte en una lámina crujiente y ligera. Sobre ella se dispone una capa de cebolla caramelizada o tomate rallado, pimientos asados o calabacín laminado, y finalmente los boquerones frescos, limpios y abiertos, que se cocinan justo el tiempo necesario para mantener su jugosidad y sabor.
En algunas versiones se añaden aceitunas negras, alcaparras o hierbas mediterráneas que realzan su aroma y le aportan un toque más sofisticado. El resultado es una coca sabrosa, con contraste de texturas y un equilibrio perfecto entre el dulzor de las verduras y la intensidad marina del pescado.
En Dénia, la coca cruixent de seitons es símbolo de esa cocina que mira al mar y aprovecha al máximo los productos frescos de la lonja. Ideal como aperitivo, tapa o plato ligero, representa la esencia de la gastronomía local: sencilla, auténtica y profundamente mediterránea. Disfrutarla con una copa de vino blanco o una cerveza fría frente al mar es una de esas experiencias que saben a Dénia.
